domingo, 6 de mayo de 2012

DOLOROSO RESULTADO DEL INFANTIL”A” EN CIEZA

Resulta muy difícil escribir y hacer una crónica en un partido así, muy complicado hablar sobre unos niños tan jóvenes y buenos
chavales a los cuales tanto y tanto queremos.
Hoy se ha consumado el descenso de categoría, además de una forma tremendamente dolorosa, es un final de temporada de la cual lo más fácil es borrarse, en ésta foto no apetece mucho estar, pero éste equipo tan joven da la cara hasta en los momentos más difíciles.
Para empezar por el portero, Álvaro, uno de los jugadores del Infantil B, que después de soportar la suplencia durante tantos partidos hoy ha aguantado como una vela el chaparrón sobre su área, y si no llega a ser por su actuación hubieran encajado muchos más goles. Debemos de mencionar a todos y cada uno de los "hombres" que hoy han estado sobre el césped de La Arboleja: Álvaro, Cristián, Dani, Tomás, Enrique, Adrián, Caci, José Antonio, Miguel, Sergi (B) y Virgilio. También actuaron: Adrián (B) y Juan Carlos (B).
Paco Agudo y José Ángel estuvieron en el banquillo pero no pudieron jugar. ya a los diez minutos perdían dos a cero, las caras de los chavales decían que en ese momento se hubieran largado cada uno a su casa, pero tuvieron que aguantar durante otros sesenta minutos interminables, en los
cuales los jugadores locales del Cieza intentaron marcar cuantos más goles mejor para aprovechar la gran ocasión de hacer el partido de su vida (como debe de ser), en la foto podemos ver a Núñez junto al jugador del Cehegín Tomás, Núñez marcó la mitad de los goles encajados por los Cehegineros. Lo más fácil en ésta situación es la de culparse los unos a los otros, evidentemente siempre hay culpables cuando las cosas no salen bien, la reflexión se debe de hacer donde proceda y a quien proceda, preguntarse por qué los dos equipos infantiles han
dado el rendimiento que muestra sendas clasificaciones.
Me despido con un fortísimo aplauso a los chavales, se lo merecen porque seguramente ahora más que nunca lo necesitan y destaco de nuevo a los que nunca abandonan aunque el barco se hunda.