martes, 7 de febrero de 2012

CARTA DE UN NIÑO JUGADOR DE FÚTBOL.

A MIS PADRES, A MIS ENTRENADORES, A MIS MAYORES•

Sé que todos desean que sea feliz, sé del cariño que demuestran hacia mí, por ello quiero que me den la posibilidad de serlo, déjenme crecer de una manera pura y libre.
Déjenme jugar con la alegría que representa mi edad; No quieran que logre grandes objetivos, seguramente éstos llegarán más adelante, no hagan que me pierda cosas que ahora para mí son muy importantes.
Déjenme disfrutar de la edad que tengo pues esta sólo la viviré una vez. • No planifiquen a largo plazo mi vida.
No se entristezcan con mis caídas, pues de ellas aprenderé a levantar, y el dolor que me puedan producir se terminará un instante después y enseguida volveré a sonreír y sentir alegría por jugar.•
No busquen triunfos a través de mí, no pretendan hacerme como fueron o no pudieron ser, quiero ser ese niño que disfruta de cada momento.•
Padres quiero compartir con mis compañeros todos los momentos, los buenos y los malos, quiero pertenecer al CEHEGÍN CLUB DE FÚTBOL, un club, donde el primer objetivo es crecer como persona por encima de ser buen jugador, valórenme por mi corazón, por mis actos sinceros, no por ser el más destacado dentro del terreno de juego.•
No sufran cuando me vean jugar los partidos, no lo hagan pues en esos momentos yo soy feliz, no desesperen cuando las cosas no me salgan bien, lo importante es que yo seguiré intentándolo.• Quiero jugar sin presiones, sin retos elevados y sin tantas correcciones, no estén preocupados, ni discutan pues no existen razones para ello.•
Por favor... dejen que juegue solamente, que me divierta, dejen que sea feliz. Solo soy un niño y eso solo sucederá una vez en la vida. A ti Papá “No sé como decírtelo. Seguramente crees que lo haces por mi bien, pero no puedo evitar sentirme raro, molesto, mal. Me regalaste un balón cuando apenas empezaba a andar. Todavía no iba a la escuela cuando me apuntaste al equipo de fútbol. Me gusta entrenar durante la semana, bromear con los compañeros y jugar el domingo como lo hacen los equipos grandes. Pero cuando vas a los partidos no sé, ya no es como antes. Ahora no me das una palmada cuando acaba el partido ni me invitas a un bocadillo. Vas a la grada pensando que todos son enemigos, insultas a los árbitros, los entrenadores, los jugadores, los padres …
¿Por qué has cambiado? Creo que sufres y no lo entiendo.
Me repites que soy el mejor, que los otros no valen nada a mi lado, que quien diga lo contrario se equivoca, que sólo vale ganar.
Ese entrenador que dices que es un inepto es mi amigo, el que me enseña a divertirme jugando.
El chaval que el otro día salió en mi lugar,¿ te acuerdas ? Si, hombre, aquel a quien estuviste toda la tarde criticando porque, como tú dices, no sirve ni para llevarme la bolsa. Ese chico está en mi clase. Cuando lo vi el lunes me dio vergüenza. No te quiero decepcionar. A veces pienso que no tengo la suficiente calidad, que no llegaré a ser profesional y a ganar cientos de millones, como tú sueñas. Me abrumas. Incluso he llegado a pensar en dejarlo; pero me gusta tanto…
Papá, por favor, no me obligues a decirte que no quiero que vengas más a verme jugar

"AL PADRE/MADRE", SI TE IDENTIFICAS EN ALGO NO TE PREOCUPES YA QUE NADA TIENES QUE TEMER... ERES UN ADULTO, PERO DEBES SABER QUE ALGUIEN QUIZÁS ESTÉ SUFRIENDO... AUNQUE PUEDE QUE NO TE DIGA NADA.